sábado, 20 de octubre de 2012


WIKIPEDIA COMO HERRAMIENTA INFORMÁTICA Y DE TRADUCCIÓN

La enciclopedia libre Wikipedia es un proyecto de información compartida inmensamente grande e importante. Personalmente apoyo a esta fuente documental, aunque por supuesto, siempre con reservas. Consultar información en esta enciclopedia nos sirve, en mi opinión, para captar una idea generalizada del tema que estamos buscando. Este es un recurso donde es muy importante discriminar la información que se nos ofrece y que en muchos casos es exhaustiva en exceso, a la par que poco fiable. Pero, dejando de lado su grado de fiabilidad, es innegable aceptar que esta enciclopedia es producto de la colaboración gratuita de millones de personas de todas las partes del mundo, convirtiéndose así en una fuente de traducciones inagotables a un sinfín de lenguas. Creo que no nos quedaríamos cortos al equiparar la expansión de este recurso de la información a lo que en otro tiempo fue la imprenta.

En esta entrada me gustaría explicar los pasos que he seguido en mi primera colaboración con la Wikipedia como traductora:
  1.  En primer lugar, es recomendable crearse una cuenta.
  2. Wikipedia nos ofrece muchas maneras diferentes de colaborar. Para consultar todas estas posibilidades debemos acceder al portal de la comunidad.

3. Si queremos ayudar traduciendo artículos a nuestra lengua, pulsamos el enlace y accedemos a una página que nos ofrece una selección de artículos recomendados para traducir, así que lo último que hace falta para empezar es elegir uno de ellos y ponerse manos a la obra.

4. En mi caso y como era la primera vez, he elegido traducir un apartado en particular del artículo sobre el       magnate de las comunicaciones, Rupert Murdoch. Para mí era importante hacer esta aportación puesto que yo misma el año pasado me vi en la necesidad de acceder a esa información en español para la realización de un trabajo y me sorprendí viendo el poco contenido que existía en el artículo español.

5. Para realizar la traducción he copiado el artículo original en inglés en un procesador de texto y lo he traducido al español. Posteriormente, he entrado en el artículo de Rupert Murdoch de la Wikipedia española y he pulsado “editar”. Es ahí donde hay que copiar la información traducida y adecuarla a los parámetros de Wikipedia. Por último he añadido las referencias y el resumen del contenido, además de la fuente orginal, algo imprescindible para que me dejaran grabar la página.


6. La colaboración ha tenido éxito y se ha incorporado al artículo de manera satisfactoria.





Para terminar, me gustaría destacar algunas de las conclusiones a las que he llegado después de realizar mi aportación:

  • -      Es posible que como conocedores de más de una lengua, no seamos conscientes en muchas ocasiones de la utilidad que supone encontrar el artículo que estábamos buscando en nuestra propia lengua, es decir, por mucho que a nosotros nos sirva que la información esté completa en la Wikipedia inglesa, hay una gran cantidad de gente a la que eso no le sirve de ayuda, y es por eso en mi opinión por lo que es tan importante la labor de los traductores en un proyecto como este.
  • -          Teniendo en mente lo anterior es importante darse cuenta de que realizar la traducción de un artículo no es un juego de niños y de que pese a que es una aportación solidaria y gratuita, uno debe ser profesional al máximo. Este trabajo no consiste solo en traducir, sino en seguir la política de Wikipedia y añadir todo lo necesario a nuestro futuro artículo para que sea de utilidad (por ejemplo, referencias, enlaces, etc).

Pese a mi opinión personal (favorable, como se ha comprobado desde la primera línea de esta entrada) respecto a este recurso del conocimiento, la polémica en torno a la Wikipedia lleva mucho tiempo a la orden del día. Es un tema de debate constante que traspasa los medios de comunicación, llegando incluso a instalarse en las aulas de instituciones educativas. Con el fin de completar esta entrada, os recomendaría echar un vistazo a algunos artículos muy interesantes que he encontrado sobre este tema tanto en periódicos nacionales, como internacionales:






martes, 9 de octubre de 2012


EL TRADUCTOR, LA INDUSTRIA Y LA MODERNIDAD

Si uno quiere tener éxito en su futuro profesional debe estar concienciado desde el primer momento de que, para dedicarse a fondo a su trabajo y lo más importante, para disfrutarlo de manera plena es necesario poseer unas cualidades específicas, tener pasión por lo que haces y no dejar nunca de aprender, pues a la velocidad a la que se mueve el mundo en que vivimos eso es un lujo que nadie se puede permitir.

Para ser un buen profesional de la traducción, las cualidades necesarias serían, por ejemplo, tener facilidad para los idiomas, buena memoria y cierta habilidad en el uso de la informática. Además es muy importante ser un apasionado de la lingüística, la gramática, la ortografía… pero sobre todo, desear conseguir una meta máxima: dominar otras lenguas y culturas como si de la tuya se tratase. No obstante creo que se debe aclarar un punto antes de seguir, para lograr ser un buen profesional se necesitan unos estudios, una base que nos enseñe cómo vamos a tener que funcionar en este mundo tan complejo que es el de la traducción, y me refiero al conocimiento de las técnicas más eficaces, de los recursos más fiables, de lo que está normalizado y lo que no, etc. Por desgracia, nuestra futura profesión es una de las que más sufren el intrusismo laboral, y es que muchas personas piensan que por hecho de ser bilingües son capaces de hacer una traducción adecuada y correcta. El hecho de dominar dos lenguas a la perfección desde  una edad temprana puede suponer un trampolín perfecto para dedicarse a la traducción, pero tal y como he comentado antes, apoyando siempre estos conocimientos previos sobre unos estudios universitarios.

Cierto es, y esto he de reconocer que me apabulla bastante, que en un momento determinado el polluelo debe abandonar el nido, es decir, el traductor en formación, que lleva años culpando a sus profesores demasiado estrictos por suspenderlo sin miramientos, termina sus estudios universitarios y sale de lleno al mercado laboral. Entonces debería buscar trabajo en una agencia de traductores, pues lo normal es que su cartera de clientes sea nula. Existe otra opción, la de convertirse en traductor freelance, es decir, autónomo. Para tener éxito con esa última decisión es necesario controlar el mercado laboral, los gastos a los que vas a hacer frente, saber valorar de forma justa tu tiempo de trabajo y conocer los procedimientos de seguridad a la hora de cobrar y entregar tus trabajos, entre otras cosas. Digamos que no es algo fácil, es un nuevo mundo en el que nos vemos desprotegidos, puesto que no contamos con experiencia alguna.

Aun así esta industria de la traducción no se para por nadie y un buen traductor debería contar con el requisito indispensable de ser un aprendiz constante. No solamente son los métodos de búsqueda de información los que avanzas, sino que la traducción en sí misma, asistida por las nuevas tecnologías, se desarrolla día a día. En nuestra época de modernidad y avances en el campo de la informática es fácil encontrarse con el debate de si los traductores automáticos del tipo de Google Translate llegarán algún día a sustituir al propio traductor. Las opiniones del momento actual apuntan a que todavía estamos bastante lejos de conseguir algo así de manera que centrándonos en el presente, todo traductor debe aliarse con los recursos existentes, que no son pocos, y servirse de ellos de para realizar una traducción mucho más adecuada ahorrando tiempo de trabajo. Entre estos recursos a los que me refiero destacan sistemas como TRADOS o DéjàVu.


lunes, 8 de octubre de 2012

Presentación


Aprendiendo traducción

San Jerónimo, patrón de los traductores


Este blog está dedicado a la asignatura de Informática aplicada a la traducción, la cual es impartida por la profesora María José Chollet. A través de este espacio podré ir reflexionando sobre el papel del traductor  en el mundo profesional y su implicación con las tecnologías de la información. Además intentaré ofrecer una opinión crítica sobre los recursos más interesantes que vayamos aprendiendo en la asignatura, ya que el área de la informática y sus aplicaciones representa un universo infinitamente útil para nuestra futura profesión.


Sandra Cebrián Gil